Las excusas y las razones que dan los miembros de las iglesia para no asistir a ellas con regularidad son simplemente lamentables. "No tengo deseos de ir." "No siento la necesidad de ello." "Prefiero dormir.""Prefiero descansar y leer." "Me gusta mas pasear." "Prefiero hacer visitas.""Soy un alma poética, me gusta más ir al campo y estar en comunión con las aves, los arroyos y las flores," etc.,etc. Todo lo cual se resume en una sola palabra, la indiferencia.